Un grupo armado irrumpió en la clínica Shaddai en la madrugada del lunes 7 de abril.
El violento ataque registrado dentro del centro de rehabilitación Shaddai A.C., ubicado en Culiacán, Sinaloa, fue ejecutado por una célula delictiva vinculada a la facción de Los Chapitos, el grupo del Cártel de Sinaloa liderado por los hijos de Joaquín “El Chapo” Guzmán. Así lo informó Omar García Harfuch, titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), durante una conferencia de prensa realizada la mañana del martes.
El funcionario explicó que el atentado tuvo como blanco a un grupo rival dentro del propio cartel. Precisó que se trataba de una agresión dirigida hacia miembros de Los Mayos, la otra facción del Cártel de Sinaloa, que responde a Ismael Zambada Sicairos, conocido como Mayito Flaco. “Todo indica, son los primeros reportes pero lo vamos a informar con más precisión conforme avancen las investigaciones, que fue una célula de Los Chapitos agrediendo a una célula al interior de este centro de rehabilitación de su grupo antagónico de Los Mayos”, señaló García Harfuch.
También comunicó que ya cuentan con información sobre algunos de los vehículos que utilizaron los agresores, y advirtió que se procederá con las detenciones correspondientes para esclarecer los hechos. Las investigaciones están siendo llevadas a cabo por la Fiscalía General del Estado de Sinaloa, aunque hasta el momento no se ha reportado la detención o identificación de los responsables.
Por su parte, el gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, confirmó que los hechos ocurrieron en la colonia Colinas de San Miguel, lugar donde se encuentra la clínica de rehabilitación afectada. Relató que los atacantes irrumpieron armados en el inmueble y dispararon contra las personas que estaban en su interior. “Llegaron, les preguntaron que si eran de algún grupo (delictivo). Me imagino que nadie les dijo que sí eran. Lo que hicieron, entonces, fue rafaguear, no a todos (…) Hubo lamentablemente ocho personas fallecidas y otra más que falleció en el hospital”, explicó Rocha Moya.
Además de las nueve víctimas mortales, cinco personas resultaron heridas y tuvieron que ser trasladadas a hospitales para recibir atención médica.
Como si la tragedia no fuera suficiente, también se reportó el hallazgo del cuerpo sin vida de Guillermo Rodríguez Gaxiola, presidente de la Unión de Redes de Centros de Rehabilitación en Sinaloa y propietario de la clínica Shaddai A.C. Su muerte se dio luego de que fuera privado de su libertad.
Este ataque, que sacude a Sinaloa, no solo evidencia la brutalidad de la disputa interna entre facciones del crimen organizado, sino también la vulnerabilidad de espacios que deberían representar una oportunidad de vida para quienes buscan alejarse de ese mundo.
