El retiro de visas estadounidenses a figuras políticas y a sus familiares directos ha vuelto a ocupar titulares, luego de que trascendiera que el gobierno de Estados Unidos revocó la visa de turista a Luis Samuel Guerrero Delgado, médico anestesiólogo y esposo de la presidenta municipal de Mexicali, Norma Bustamante Martínez.
De acuerdo con información recogida por la Agencia Fronteriza de Noticias (AFN), Guerrero Delgado fue retenido el 8 de agosto en la garita oeste de Calexico, California, durante más de dos horas en una segunda inspección.
Al final del proceso, se le informó que su documento quedaba revocado con fundamento en la Sección 212 de la Ley de Inmigración y Nacionalidad de Estados Unidos, la cual contempla motivos de salud, antecedentes penales, seguridad, carga pública o fraude, entre otros. No se le precisó la causa específica.
Bustamante Martínez confirmó la revocación a medios locales, pero aclaró que, en su caso, la visa y la tarjeta SENTRI permanecen vigentes, desmintiendo versiones que señalaban que el retiro se había extendido a ella. “Mi esposo es un anestesiólogo reconocido e intachable”, afirmó, al tiempo que adelantó que emitirá un comunicado oficial sobre el tema.
El hecho se suma a una tendencia que, de acuerdo con observadores políticos y reportes periodísticos, ha ido en aumento en los últimos años: la cancelación de visas a funcionarios y familiares cercanos. Ejemplos recientes incluyen el caso de la gobernadora de Baja California, Marina del Pilar Ávila Olmeda, y su esposo, el excoordinador de gabinete Carlos Torres Torres, quienes también habrían sido objeto de esta medida.
Consultada un día antes sobre las relaciones binacionales y las alertas de viaje emitidas por Estados Unidos, la alcaldesa consideró que estas advertencias forman parte de un ejercicio de “injerencia en las fronteras” con México, postura que hoy cobra relevancia ante lo ocurrido con su esposo.